miércoles, 17 de junio de 2009

Cambio sol y playa por espacio protegido.

La familia española media ya no pone rumbo a la costa para disfrutar del sol durante el mes de vacaciones estivales. Sus estancias en los destinos de playa son hoy más cortos y no siempre en territorio nacional. Otros países ofrecen costa, alojamiento en pensión completa y avión por el mismo precio, o por menos. Casi nadie ya pone en duda que la fórmula tradicional de turismo de sol y playa ha dejado de ser competitiva. La cuestión es cómo renovar un sector que supone el 11% del PIB nacional.

Las empresas del sector y las administraciones autonómicas coinciden en que es necesario fomentar la diversificación del turismo y su desestacionalización; por ejemplo, desvincular la montaña de los deportes de invierno y abrirla a otras actividades a lo largo de toda la temporada turística.



Los espacios naturales protegidos son una de estas nuevas opciones turísticas, que empiezan a calar en la población. Su número ha pasado de 49 en 1986 a 1.620 en 2008. Según cifras de Europarc-España, rama española de la Federación de Parques Naturales y Nacionales de Europa (Europarc), reciben 36 millones de visitas anuales.



El sector está en fase de despegue. El impulso definitivo para asentar esta fórmula de turismo y generación de empleo que cubre el 12,7% de la geografía española "exige una gran coordinación con las políticas locales", explica Hermelindo Castro, presidente de Europarc-España. Según las cifras de este organismo, la inversión directa en la gestión de los espacios naturales protegidos alcanzará 300 millones de euros en los próximos años.



El cambio en la percepción de estos espacios está ayudando a su desarrollo económico. "Con frecuencia han sido percibidos como un freno para la activación económica de las comarcas. Sin embargo, contribuyen al desarrollo rural, son fuente de nuevos empleos y una oportunidad para el impulso de nuevos negocios", según recoge la guía Emprendedores y empleo de espacios naturales protegidos de Castilla y León.



El 13% de la superficie de esta comunidad autónoma contiene 40 espacios protegidos. La pequeña empresa El Acebarillo nació en 2001 para trabajar en la conservación del Acebal de Garagüeta, una dehesa boyal de 406 hectáreas en Arévalo de la Sierra, un pueblo de 83 habitantes.



Ante la amenaza que pesaba sobre el bosque más extenso que existe de acebo puro, por la reducción del pastoreo y el abandono del campo, los vecinos de Arévalo decidieron crear esta pequeña empresa, desde la que venden artesanía con acebo, organizan rutas por el acebal y ofrecen actividades de educación ambiental para niños y adultos.



El hotel Milano Real, en Hoyos del Espino, nació del deseo de cambiar de vida de sus fundadores, Paco y Teresa, que han creado en el límite del Parque Regional de la Sierra de Gredos un alojamiento de lujo.



Servicios turísticos y productos artesanales son las claves del desarrollo económico de las comarcas que rodean los espacios naturales protegidos. Andalucía es uno de los alumnos aventajados en España, según los expertos. La red de Parques Naturales de esta región ha creado marca propia, el sello Parque Natural de Andalucía, que ya aglutina 183 empresas y 1.125 productos.



Este sello de calidad "pretende incentivar las actividades empresariales y económicas que sean compatibles con la preservación del patrimonio natural de los parques a través de un aprovechamiento sostenible de sus recursos. Las empresas certificadas se benefician, de esta forma, de los valores vinculados a estos espacios, confiriendo a sus productos y servicios un marchamo de calidad que permiten mejorar su comercialización", explica la Fundación Espacios Naturales Protegidos de Andalucía (Andanatura), en su página web.



Para obtener el sello de calidad, los productos naturales deben extraer el 75% de su materia prima dentro del parque. Los alimentarios deben provenir de explotaciones cuyos sistemas de producción sean integrados o ecológicos.



Además de oportunidades de negocio, los espacios naturales protegidos fomentan el desarrollo de perfiles profesionales ligados al medio ambiente. El proyecto Ecofuturo, de la Fundación Promoción Empleo y Servicios en Salamanca, iniciará en 2010 una serie de cursos sobre conservación de los espacios naturales, cuyo objetivo es la creación de dos empresas de servicios forestales y jardinería y de venta de setas.



Guía y agente forestal, técnico en gestión de espacios naturales, información y educación ambiental, capataz forestal son algunos de los empleos en pleno desarrollo en los espacios naturales protegidos.

Fuente: cincodias.com

martes, 16 de junio de 2009

La inclusión de personas hacia un nuevo paradigma.

La gestión de personas es la gestión de sus diferencias, de sus diversidades. Y hoy, más que nunca, cuando se ha entrado en una crisis que requiere no una vuelta atrás sino una avance hacia nuevos paradigmas, hay que revisar y reinventar la forma de trabajar y vivir.

Hay que cuestionarse si se puede prescindir del talento altamente diverso de personas con otras culturas, formas de pensar, comunicar y resolver situaciones; de trabajar en equipo… Hay que desarrollar nuevas formas de trabajo que sean más eficientes para las organizaciones y más satisfactorias para las personas ante sus nuevas prioridades.

Hoy, cuando los modelos que se han implementado en la gestión integral de la gobernabilidad, la economía y la sociedad han llevado a la situación institucional de ruptura actual, es el momento oportuno para crear nuevas estrategias que aprovechen las lecciones aprendidas en este proceso y se diseñen con valentía para valorar a las personas por su contribución a resultados y no por el tiempo de presencia en las organizaciones.

Es el momento óptimo para escuchar a las personas ‘diversas’, diferentes al estereotipo habitual de la organización, en busca de nuevas fuentes e ideas, soluciones y procesos. Se debe aprender de los errores y que impere la meritocracia, el respeto a las diversidades y la sabiduría. Desterrar para siempre el concepto de estereotipos y minorías. Gestionar organizaciones y corporaciones ejerciendo la Responsabilidad Social hacia las personas que confirman sus comunidades, lo que tiene que ser innato a su razón de ser.
Myrtha Casanova, fundadora del Instituto Europeo para la Gestión de la Diversidad.

miércoles, 10 de junio de 2009

CONTRA LA CRISIS, EMPLEOS VERDES

Los empleos ambientalmente sostenibles, conocidos internacionalmente con la expresión inglesa «green jobs», han generado ya millones de puestos de trabajo en el mundo, tanto en los países desarrollados como en las economías emergentes y en los países en desarrollo.
Sólo en el sector de las energías renovables se han creado ya 2,3 millones de empleos en el mundo, una cifra que podría llegar a los 20 millones en 2030.
Estas son algunas de las conclusiones del informe «Empleos verdes, hacia el trabajo decente en un mundo sostenible y con bajas emisiones de carbono», promovido por el Programa Mundial para la Naturaleza de la ONU (PNUMA), la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y la Confederación Internacional de Sindicatos (CSI). El informe, elaborado por el World Watch Institute y la Universidad de Cornell (EEUU), se presentó en Nueva York por los máximos responsables del PNUMA (Achim Steiner), la OIT (Juan Somavia) y la CSI (Guy Ryder). El informe analiza en profundidad la situación actual y las perspectivas de futuro de los empleos verdes, aquellos que reducen el impacto ambiental de las empresas y de los sectores económicos hasta alcanzar ni veles de sostenibilidad. Se entiende, por tanto, como empleo verde el trabajo en la agricultura, la energía, la industria, los servicios y la administración que contribuye a conservar o restablecer la calidad ambiental.
La investigación pone de manifiesto que el mercado global de productos y servicios ambientales se duplicará de aquí a 2020 y pasará de 1.370 a 2.740 millones de dólares al año. La mitad de este mercado se refiere a la eficiencia energética y el resto al transporte sostenible, el suministro de agua y el tratamiento de residuos. Todo ello sin contar con dos grandes cambios: la producción en masa de medios de transporte individual o colectivo que usen energías menos contaminantes o limpias y la consolidación internacional de las energías renovables como alternativas sustitutivas de las convencionales.
La apuesta por las energías renovables, el equilibrio territorial, la suficiencia alimentaria, la gestión racional de los recursos naturales, el turismo sostenible, la eficiencia energética, la nueva cultura de la movilidad y el transporte público son apuestas socialmente justas y ambientalmente sostenibles, pero además tienen dos importantes ventajas: requieren un importante esfuerzo de I+D+i y son intensivas en mano de obra. Crean empleo con valor añadido.
Empleos verdes: Hacia el trabajo decente en un mundo sostenible y con bajas emisiones de carbono
Resumen del informe en español disponible aquí: Organización Internacional del Trabajo

miércoles, 3 de junio de 2009

Jornada en Málaga

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La Universidad de Málaga y la Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol (AEHCOS) compartirán conocimiento y experiencia.

Hace tiempo que la Universidad de Málaga y la Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol (AEHCOS) buscan unir sus fuerzas para compartir conocimiento y experiencia con la que mejorar la formación e innovar en la industria básica de la economía malagueña, el turismo. Ayer fue el día en que este trabajo quedó reflejado en un convenio de colaboración, con el que ambas instituciones sellaron un gran acuerdo que abre una nueva etapa. La rectora de la Universidad de Málaga, Adelaida de la Calle, y el presidente de Aehcos, José Carlos Escribano, coincidieron en destacar que a partir de ahora inician un camino que permitirá diseñar programas conjuntos relacionados con la investigación, el desarrollo, la formación de alumnos y profesionales y la innovación.

Primer paso

«Este convenio es un primer paso en el objetivo de la UMA de ser un Campus de Excelencia Internacional, para lo que se precisa estar en los ámbitos de proyección económica más significativos. El acuerdo permitirá atraer talentos y era esencial trabajar en esta área de tecnología del turismo y del ocio», dijo De la Calle. La rectora precisó que el convenio no se ciñe sólo a los estudiantes de Turismo sino que amplía el radio a las ingenierias de la comunicación, a las carreras de Humanidades, de Económicas y Empresariales o la de Arquitectura. Todos estos estudiantes pueden aportar mucho al sector turístico y recibir del hotelero la dilatada experiencia y un complemento ideal en la formación con la posibilidad de realizar prácticas en un campo más amplio que el vinculado exclusivamente al turismo.

El presidente de Aehcos dijo: «la empresa hotelera del siglo XXI está inmersa en la sociedad del conocimiento y la tecnología. La innovación y la formación son piezas básicas que facilitan este acuerdo que nace con proyección de futuro». El convenio incluye la organización de actividades comunes relacionadas con la promoción social de la investigación, el desarrollo tecnológico, la innovación y las nuevas tecnologías, sin olvidar la puesta en marcha de cursos, seminarios, conferencias y jornadas científico-técnicas y de formación. Una comisión técnica, que por parte de Aehcos está representada por Enrique Cibantos, se encargará de concretar estos proyectos.